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Crónica: ¿El ‘cuarto poder ausente’ en mi barrio?

  • Marcos Jesús Concepción Albalat
  • 21 nov 2016
  • 7 Min. de lectura

En cualquier parte del mundo cuando a una persona se le pregunta ¿qué son los medios de comunicación?, te responden sin pensarlo ‘el cuarto poder’… Para bien o para mal los medios de comunicación te mantienen informado o desinformado, y supuestamente, a todos los niveles influyen…


En Cuba, conociendo incluso el nivel intelectual y político de nuestra población, existe un sector que carece de cierta información local, es decir, no es producto de la inexistencia de la prensa, todo lo contrario, pero demostrado esta o que no les interesa, o quizás consideren que carezcan de ciertas motivaciones que los haga inclinarse a la información… Sé que el tema a tratar es bien escabroso, es como me dice un buen amigo y compatriota, ‘te estas metiendo en camisa de 11 varas’…


¡Ah!… Pues no, tengo posiblemente el mejor ‘sastre’ para mí ‘camisa de 11 varas’ sobre el tema que trataré aquí, porque aprovecharé algunas interesantes notas de la exhortación a la prensa que hizo en su discurso el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, en la clausura de la Primera Conferencia Nacional del Partido, en el Palacio de Convenciones, el 29 de enero de 2012, "Año 54 de la Revolución", para explicar a través de mi punto de vista, y comparándola, incluso, con una siniestra época que me tocó vivir cuando niño…


Por favor, antes de continuar con mi Crónica, invito a leer las siguientes notas sobre mi referencia…


  • Si hemos escogido soberanamente, con la participación y respaldo del pueblo, la opción martiana del partido único, lo que nos corresponde es promover la mayor democracia en nuestra sociedad, empezando por dar el ejemplo dentro de las filas del Partido, lo que presupone fomentar un clima de máxima confianza y la creación de las condiciones requeridas en todos los niveles para el más amplio y sincero intercambio de opiniones, tanto en el seno de la organización, como en sus vínculos con los trabajadores y la población, favoreciendo que las discrepancias sean asumidas con naturalidad y respeto, incluyendo a los medios de comunicación masiva, mencionados varias veces en los Objetivos aprobados en esta Conferencia, los que deberán involucrarse con responsabilidad y la más estricta veracidad en este empeño, no al estilo burgués, lleno de sensacionalismo y mentiras, sino con comprobada objetividad y sin el secretismo inútil.

  • A este fin es necesario incentivar una mayor profesionalidad entre los trabajadores de la prensa, tarea en la que estamos seguros contaremos con el apoyo de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), los medios de comunicación y de los organismos e instituciones que deben tributarles información fidedigna y oportuna para, entre todos, con paciencia y unidad de criterio, perfeccionar y elevar continuamente la efectividad de los mensajes y la orientación a los compatriotas.

  • Al propio tiempo, la conformación de una sociedad más democrática contribuirá también a superar actitudes simuladoras y oportunistas surgidas, al amparo de la falsa unanimidad y el formalismo en el tratamiento de diferentes situaciones de la vida nacional.

  • Es preciso acostumbrarnos todos a decirnos las verdades de frente, mirándonos a los ojos, discrepar y discutir, discrepar incluso de lo que digan los jefes, cuando consideramos que nos asiste la razón, como es lógico, en el lugar adecuado, en el momento oportuno y de forma correcta, o sea, en las reuniones, no en los pasillos. Hay que estar dispuestos a buscarnos problemas defendiendo nuestras ideas y enfrentando con firmeza lo mal hecho.

  • Ya hemos dicho en otras ocasiones y así también se recogió en el Informe Central al 6to. Congreso, que lo único que puede conducir a la derrota de la Revolución y el Socialismo en Cuba, sería nuestra incapacidad para erradicar los errores cometidos en los más de 50 años transcurridos desde el primero de enero de 1959 y los nuevos en que pudiéramos incurrir en el futuro.

  • No ha existido ni existirá una revolución sin errores, porque son obra de la actuación de hombres y pueblos que no son perfectos, enfrentados además, por primera vez, a nuevos y descomunales retos. Por eso creo que no hay que avergonzarse de los errores, lo grave y bochornoso sería no contar con el valor de profundizar en ellos y analizarlos para extraerles las enseñanzas a cada uno y corregirlos a tiempo… (Fin de la cita)…


Para los que me conocen, o han leído algunas de mis Crónicas, saben que procedo de una familia extremadamente humilde… Que nací en la Sacristía de la Iglesia ‘Santa Elena’ de mi barrio Casilda, Trinidad, SS, Cuba… y recordando esa época, la que me tocó vivir en ese lugar hasta los 11 años, recuerdo perfectamente bien que en mi casa nunca oí a mi abuela Blanca Rosa (EPD), a mi mamá, ni a mis tíos o tías, quejarse por ser pobres, es decir, nacimos rodeados de pobreza y así teníamos que morirnos, sin derecho a reclamar o a exigir por la providencia divina… Así se comportaba la vida para los que habíamos nacido muertos de hambre y necesitados de lo más mínimo… Los designios del destino y la Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana no los confirmaba a través del Padre Escudero en sus misas dominicales, y en el caso nuestro, sentíamos, de cierta manera, extrema conformidad porque vivíamos muy ‘cerca de Dios’, según mi abuela Blanca…


Mis hijos mayores, cuando les comento sobre estos temas, me responden ‘…papá, por favor, de nuevo el mismo discurso… Papá ¿no te das cuenta que hoy son otros tiempos?’...


¿Leyeron bien de lo que me expresan mis hijos? ‘¿No te das cuenta que son otros tiempos?’... Es decir, en mi tiempo existía pobreza, hoy no… En mi tiempo no existían las bodegas repletas de comida, las tiendas repletas de juguetes, las peleterías repletas de zapatos, en mi tiempo no se vendían automóviles… En fin, nací en malos tiempos… ¿Quién no me entendió?...


Cuando nos sentábamos en la mesa a comer lo poco que había, ya hubiera sido una ración de yuca, o harina de maíz, ninguno de los comensales acusaba al entonces ‘Presidente’ de Cuba, el dictador y asesino Fulgencio Batista, de ser el culpable de que en aquella mesa no había casi nada que comer… Incluso, nunca le oí reclamar a mi madre las razones por la que falleció mi tío Jesús o mi hermano con solo 3 meses de nacido…. Por supuesto, con el tiempo, cuando despertamos del letargo de la etapa republicana más oprobiosa y vergonzosa que tuvo la nación cubana, logré saber las muchas causas que en ese entonces siendo yo un niño desconocía…


Sin embargo, y atiendan esto los muy conocedores de lo importante que son los Medios de Comunicación, en mi hogar de nacimiento se conocía perfectamente muy bien quien era el Alcalde del Municipio de Trinidad, así como los llamados ‘Sargentos Políticos’, que no eran más que los delincuentes que enseñaban sus rostros cuando se estaba en plena campaña política por la alcaldía del Municipio trinitario, estos aberrantes seres humanos eran los que se encargaban de comprarle los votos a los más necesitados por unos pocos pesos, estos, recuerden bien, eran los ‘Sargentos Políticos’, siniestros y corruptos que todavía pululan en la mayoría de nuestros pueblos hermanos de América Latina, y también en los países del Primer Mundo disfrazados de ‘cabilderos’, ‘lobistas’ o también conocidos como ‘estrategas políticos’…


Vamos al caso… Recientemente publiqué una Crónica que se titula ‘Anoche tuve un sueño’, en esta trataba una propuesta que dirigía por escrito al ‘Presidente del Consejo del Poder Popular’ de mi Barrio Casilda, y para hacerla más original, más auténtica, pues decidí escribir el nombre del Compañero o Compañera que dirigía en la vida real dicho ‘Consejo del Poder Popular’… Recurrí a varias personas amigas de mi Página en Facebook Trinitario Casildeño Cangrejero preguntándoles el nombre de la persona que lo dirigía, y no me supieron decir, incluso, dos de ellos trabajadores de los Medios de Comunicación y uno en el Organismo del Ministerio de Cultura Municipal… Pasaron más de 10 días y, por fin, una Compañera me facilitó el nombre y sus apellidos…


Pregunto… ¿Cómo es posible que, en muchísimos casos, un ciudadano cubano a nivel de su Circunscripción no conozca a su Delegado del Poder Popular, o al Presidente del Consejo del Poder Popular de su barrio?… Esto me puso en alerta, y empecé a hacer una especie de encuesta en la Red sin hacer ‘ruidos’, teniendo en cuenta el llamado que le hizo a la Prensa el Presidente Raúl… También me di a la tarea de revisar las Páginas (Web) de algunos periódicos, desde el ‘Granma’, ‘Juventud Rebelde’, ‘Trabajadores’ y otros a nivel provincial…


¿Qué detecté en estos periódicos, o diarios, a nivel nacional y Provincial?… Un denominador común: Que casi todo lo que publica el Órgano Oficial del Partido Comunista Cubano, Granma, lo reproducen en los demás periódicos, incluso, la mayoría de las fotos carecen de su descripción (‘Pie de foto’)… Y en muy pocos periódicos Provinciales se prioriza la información sobre las actividades de los Gobiernos locales, es decir, en estos medios de prensa escrita se informa mucho más sobre las gestiones de los Organismos centrales que de las Provinciales y Municipales…


Esta desafortunada estrategia informativa de tipo ‘horizontal’, produce en el ciudadano común, sobre todo al más necesitado, el mejor pretexto para culpar, hasta del ‘hueco’ que tiene la acera frente a su casa, al Gobierno Central y no al local, o al que lo representa en su Circunscripción, o sea, para la mayoría de los medios de prensa en la República de Cuba existe un Presidente pero no Jefes de Gobiernos a nivel de barrio, municipio o provincia… De esta forma se ignora la estructura y la esencia de la Democracia Participativa de la población con el Gobierno Local… Y regresando a mi época de adolescente, en mi casa no se mencionaba al entonces Presidente de la Republica como el responsable por la falta de acueducto en mi barrio de Casilda, sino al Alcalde de Trinidad… No existía el acueducto, ¿saben los que me leen lo que eso significaba?...


Preguntémonos francamente, con honestidad, con toda la sinceridad del mundo, ¿Cuántas veces no se ha oído decir a nivel de cuadra que la falta de agua es porque Fidel o Raúl no lo saben?… ¿O que Fidel o Raúl es el responsable de que falte la malanga?… etc…


El Presidente Raúl tiene toda la razón del mundo cuando en su discurso rechaza la mala práctica de la unanimidad… Yo lo escribiré a mi manera: ‘La unanimidad de criterios, existe solo y únicamente en el cementerio’…


*Marcos Jesús Concepción Albalat… (Trinidad/Casilda, S.S., Cuba) Agosto 03-1947… Reside en Miami, Florida, Estados Unidos… Licenciado en Gestión Comercial Internacional… @: marcosjesus360@yahoo.com – Director de la Agencia de Información ‘ArgosIs-Internacional’ en la Red… argosisdirector@yahoo.com - Web: http://www.argosisinternacional.com...

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