Análisis: La crisis social estadounidense y el “fenómeno” Trump en su justo lugar (CON POSDATA DE MA
- xFernando M. García Bielsa
- 18 ago 2018
- 23 Min. de lectura

ANALISIS… ARGOSIS: AGOSTO 13 DE 2018…
xFernando M. García Bielsa
Cubacebate
El presidente estadounidense Donald Trump es justamente blanco universal de críticas y rechazo. Todo lo que se pueda decir del personaje como ente repugnante, extravagante y reaccionario es poco. Sus groserías, exabruptos verbales y buena parte de las políticas que propugna o ejecuta justifican ese rechazo y, ciertamente desprestigian a la presidencia de ese país. Pero sus twits y payasadas no deben impedirnos ver algo más allá.
Ha habido un sobredimensionamiento del peso de la figura, los actos y la personalidad de Trump a la hora de analizar lo que ocurre en EE.UU., lo cual desvía la atención y hace perder de vista muchos factores fundamentales y lo que está en juego en el seno del imperio.
Aquí pretendemos ubicarlo en el momento y las realidades que le han dado vida, y no dejar fuera de la escena las poderosas y también reaccionarias fuerzas que en ese país se le oponen, de modo que sopesemos las consecuencias de lo que pretenden unos y otros.
No es tarea fácil y no pretendemos ser conclusivos ni limar todas las aristas de una coyuntura compleja y de una presidencia bastante inédita y contradictoria. A ninguno de quienes seguimos esta situación nos corresponde asumir el relato manipulador ni la retórica de Trump ni de quienes se le oponen, incluyendo los grandes medios de difusión. Eso sí, entre todos, se necesita prestar mayor atención, como asunto central, a las divisiones y fracturas que existen al seno de la clase dominante de EE.UU.
Una parte de las políticas del actual gobierno en realidad no son nuevas. Son las típicas políticas imperialistas y que fueron antes impulsadas y aplicadas por los presidentes y gobiernos que le antecedieron, tanto republicanos como demócratas y que se enmarcan en la desvergonzada pero enraizada pretensión de que son una nación predestinada por la providencia, excepcional en el mundo, con lo que se escudan para salvaguardar indefendibles injusticias domésticas o guerras criminales. Se hace evidente que la esencia del “excepcionalismo” estadounidense es la pretensión de que pueden hacer lo que quieren en el mundo debido a que lo estarían haciendo por ‘buenas razones’.
Así la decisión primaria de trasladar a Jerusalén su embajada en Israel no es del actual gobierno: fue un acuerdo por mayoría abrumadora en el Congreso en 1995, acogido por todos los presidentes, aunque postergada su ejecución por cada uno de ellos. Ahora bien aunque la decisión sigue siendo geopolíticamente riesgosa, complace en un aspecto clave a la influyente base evangélica republicana del presidente.
El muro en la frontera con México tampoco es algo nuevo; cogió impulso en aquella década con Bill Clinton, construido por tramos de cientos de kilómetros como parte de la llamada Operación Guardián (Gatekeeper) y actualmente cubre unos dos tercios de la frontera. Aparte que con este proyecto Trump también complace a gran parte de sus adherentes resentidos y xenofóbicos, seguramente generará un muy jugoso negocio, sobre todo para algunos grandes capitales que lo apoyan.
La política antiinmigrantes es de larga data y es un tema manipulado de manera oportunista por la mayoría de los políticos yanquis. Ante los anuncios, exabruptos y declaraciones racistas del Presidente, Obama y los demócratas han pretendido mostrarse como defensores de los inmigrantes, cuando durante esa y otras administraciones millones fueron deportados, se hacían redadas y la frontera fue fuertemente militarizada.
Con descomunales partidas se aumenta cada año el presupuesto militar debido a la inmensa influencia política del llamado Complejo Militar-Industrial. Mayorías abrumadoras de ambos partidos aprueban esos gastos. Ante la propuesta del Presidente en 2017 de aumentar el presupuesto en unos $54 mil millones de dólares, el Congreso aumentó la parada y finalmente aprobó $100 mil millones, con lo que el presupuesto militar llega a los $700 mil millones: casi el 40% de los gastos militares del planeta.
Lo anterior no es en defensa de Trump sino para constatar, y hay muchos más ejemplos, que muchas de las políticas que impulsa su gobierno, son parte de ese actuar en buena medida consensuado que se corresponde con la naturaleza explotadora, imperialista y racista del sistema.
Fracturas sociales como importante pivote del triunfo electoral Aparte de la impronta que le añade Trump, su propia elección y parte de la exacerbación de las políticas del imperio norteño, son un reflejo del declinar o pérdida de la hegemonía de antaño. Accidentes al margen y entre muchos otros factores, su elección fue posible debido al casi universal rechazo popular a las élites de Washington y de Wall Street, a las notables fracturas sociales en el país, bajo el impacto acumulativo de la globalización y el neoliberalismo, la ‘sobre expansión imperial’, los excesivos gastos militares y el desmesurado crecimiento de la especulación y las inversiones no productivas, bajo los imperativos del mercado. De ahí se deriva una sostenida disminución del ritmo de aumento de la productividad en muchos sectores de la industria, aumento de empleos parciales y mal pagados, el deterioro del status de la clase trabajadora y de regiones enteras que se sienten abandonadas y han visto reducir sus condiciones de vida sin que aprecien que el gobierno o el Congreso se preocupe por ellos.
Y ahí aparece un hábil demagogo, un empresario exitoso y sin antecedentes en la política, pero en definitiva un hombre del sistema, que con ayuda de algunos grandes magnates conservadores y de muy extendidas redes de agrupaciones de derecha en todo el país y, ciertamente en las zonas rurales, logró desplegar una eficaz campaña y capacidad para manipular los resentimientos y temores de millones.
Esa base de apoyo (junto a intereses millonarios en sectores como los bienes raíces, de la construcción, de la explotación minera, y otros) está en las profundidades del país, en estados rurales, sectores empobrecidos hartos de los políticos y de la élite del país, quienes se sienten víctimas de la globalización, del abandono gubernamental y que son empujados a buscar chivos expiatorios por sus problemas y reducción de sus niveles de vida y que sienten como que su mundo se viene abajo. Un ambiente propicio para cierto tipo de populismo nacionalista sigue siendo una de las más poderosas fuerzas en la política del país.
Parte de ello es la promesa de hacer de nuevo a los Estados Unidos grande y exitoso, de hacer regresar los puestos de trabajo y los capitales que se han fugado al exterior, y su capacidad de redirigir contra chivos expiatorios y a su favor las angustias de muchos. Al mismo tiempo, desde su base, muchos elementos racistas y ultranacionalistas se han sentido empoderados y reverdecen su activismo.
Se dice justamente que Trump no es el cambio sino fruto de esos cambios y esas contradicciones; un síntoma de la crisis. Como acabamos de indicar, el desespero y disgusto de millones tiene raíces sociales profundas – y demográficas, regionales, políticas – de modo que sin Trump o después de él, el fenómeno persistirá. Los Estados Unidos es aun el país más poderoso, pero los cambios geopolíticos, el impacto acumulativo de una excesiva sobre expansión imperial le están pasando la cuenta.
Además, internamente, se venía produciendo un creciente activismo y exacerbación de tendencias conservadoras en el país. Con las fuerzas que acompañan al actual mandatario, ha cuajado también un añejo proceso de empoderamiento de sectores de la llamada nueva derecha entre los republicanos, que tiene como contraparte un similar proceso de derechización entre los demócratas.
La pérdida de sensibilidad de los partidos del sistema, de los hacedores de política en Washington y de los que detentan el poder real se pusieron de manifiesto en las elecciones de 2016 y es parte importante de lo que explica por qué Trump se impuso sorpresivamente tanto en la nominación republicana como en las elecciones de noviembre, cuando claramente no era el favorito del ‘establishment’.
Ocurrido eso, algunas mentes lúcidas previeron o apuntaron la hipótesis que con Donald Trump asistiríamos –durante un tiempo- a un cierto margen de autonomía de un Ejecutivo arisco en el férreo marco de unos lineamientos de política interior y exterior cuya continuidad estaría, en lo esencial, garantizada por aquellos actores centrales que configuran el “poder real”.
Ahora bien, el magnate no actúa sólo, ni al servicio de una minúscula elite. Representa a grandes capitalistas norteamericanos. Es importante notar que muy poderosos intereses agrícolas y de agro negocios han estado históricamente alineados con los republicanos. La salida del acuerdo climático juega con la fuerte determinación e intereses de desarrollar la producción de hulla, petróleo, gasoductos, etc., todos contaminantes…
Muchas corporaciones se beneficiarán con los masivos fondos y subsidios que se destinarían a la modernización de las infraestructuras del país.
Sin dudas, la actual administración, compuesta por elementos clave de la clase empresarial, llevará a cabo políticas internas que dañarán extensamente el bienestar de las clases populares – al margen de su palabrería acerca de que gestiona el regreso al país de capitales y puestos de trabajo.
Que una personalidad como él haya llegado a la presidencia es también reflejo de la tremenda fragmentación que existe en la sociedad estadounidense, en momentos de su declinación económica e imperial, declinación que por el momento no llega al punto de dejar de ser el país más poderoso del planeta. La declinación se refleja de manera desigual en la sociedad, con decenas de millones cuyos estándares de vida se han visto seriamente afectados.
Imposible, y además innecesario, referir aquí todas las barbaridades que ha dicho en su año y medio como presidente, ni siquiera las que dice en un trimestre, ni cuantificar las veces que miente, como algunos pretenden. Tampoco las muchas acciones contrarias a los patrones lógicos del quehacer de la política en su país y a los análisis habituales. Creo que aquí entran, aparte de su personalidad e irreverencia, el zigzagueo a que está obligado en medio del pulseo que tiene lugar en los círculos del poder.
Por otra parte, tomemos nota que, son tan brutales y descarnadas muchas de sus declaraciones y sus políticas, despojadas de la cobertura edulcorada y engañosa de su predecesor, que resulta ser un vocero del imperio que concita muy extendido rechazo y con el potencial de generar mayor concertación de adversarios tanto dentro de EE.UU. como en la esfera internacional.
En parte de lo antedicho y en lo que sigue, si se quiere, partimos de consideraciones que desafían o se distancian de lo “políticamente correcto”, pero también de lo anecdótico.
Por todo lo repugnante, arrogante y pretencioso que resulta el personaje, queremos tener un acercamiento a lo que se esconde o se presupone que se esconde detrás de sus estridencias y sus giros ‘impredecibles’ de política. Es sabido que en lo que se ve (o se escucha) casi nunca hay correspondencia con la realidad de un fenómeno.
El Presidente en su laberinto
Por muy lógico que sea el rechazo que genera, casi que se ha establecido una visión estereotipada acerca del actual presidente norteamericano, que no ayuda a un análisis serio. En estas líneas queremos ubicar el fenómeno Trump en el contexto que le ha dado origen y en hipótesis acerca del complejo marco en que se desempeña.
Este reaccionario personaje debe ser repudiado en sí y como cabeza del imperio, pero sin perder de vista la cualidad también maligna de muchos de sus adversarios políticos, que incluyen republicanos, demócratas y otros que desde hace algún tiempo han asumido el rol de “partido de la guerra”; la gran prensa manipuladora; las agencias de seguridad; recordar que el procurador que lo investiga no es figura inocente sino un ex jefe del FBI, etc. No se debe descartar sin embargo que si el Presidente se viera arrinconado pudiera llegar a ser un factor verdaderamente peligroso.
De entrada descarto la tesis de un personaje mentalmente desequilibrado. Aunque por momentos pareciera que actúa por impulsos, hay que considerar el marco en que se mueve, las presiones que enfrenta, en medio de muy poderosos y bien asentados centros de poder y poderes en la sombra, y sin que cuente siquiera con el respaldo de una parte de su propio partido. Como resultado se estaría dando una mezcla de políticas reaccionarias e impresentables que son de su cosecha, con otras que ha debido asumir en medio de tales presiones cruzadas.
No me caben dudas que llegó a la nominación republicana y al triunfo electoral sin ser el candidato favorito del llamado establishment; sin el consenso, como ha sido habitual, de la oligarquía del país, sobre todo de sus segmentos financiero y transnacional. Aun desde antes de ganar la presidencia ha enfrentado una brutal campaña como no se ha visto antes con un presidente en etapa tan temprana.
Aunque ha sido atacado por una inmensa pluralidad de asuntos y conjeturas, parto de la convicción que el tema de las supuestas conexiones con Rusia, que ha sido central y permanente en la campaña (acompañada de los entes que lo investigan y amenazan procesarlo), ha sido esencialmente montado para impedir el acercamiento con Moscú, poner a Trump a la defensiva y obligarlo a atemperarse a las políticas básicas del interés de la élite.
Un elemento esencial que guía a una parte de sus oponentes es la pretensión o la necesidad de mantener un clima de guerra y de tensiones, a lo que por momentos el Presidente parece acomodarse, aunque también ello se confunde o trastoca dado el concepto negociador y hábitos del mismo de lanzar grandes amenazas como via de ablandar a sus adversarios antes de pasar a una negociación, libre de ataduras y acuerdos multilaterales.
Otro ejemplo, en el mismo sentido ha sido su aparente inconsecuencia y oscilaciones con los nombramientos en el gabinete y asesores en la Casa Blanca, asunto en que obviamente de entrada se vio forzado a sustituir figuras de su entorno por otras más del gusto del establishment o de sectores opuestos de su propio partido, para luego maniobrar, volver a la carga y reinstalar otras más de su confianza y entorno.
El pulseo con el establishment permanece irresuelto y se supone que sólo con las elecciones de medio término las aguas cogerían su nivel en un sentido o en el otro. Aunque el presidente ha debido congeniar con algunos de esos intereses, no caben dudas de sus habilidades ante el cerco mediático y judicial, y no ha dejado de defenderse como gato boca arriba o, incluso, de tomar con frecuencia la ofensiva.
Por el momento el gobierno se ha beneficiado con una momentánea pero marcada recuperación económica, aunque existen opiniones divididas sobre la consistencia de la misma. Algunos autores estiman que el repunte sólo encubre la explosividad financiera subyacente.
Aunque el grueso de los círculos financieros y de Wall Street apostaban por Hillary Clinton, con el cursar de los meses de la presidencia de Trump muchos cambiaron de opinión y apoyan las políticas de este que les han permitido obtener desregulaciones financieras de su preferencia, reducciones de impuestos que deseaban y otros estímulos.
Asimismo, todo parece indicar que Trump sigue apelando y cuenta con considerable apoyo de muchos de los que le dieron el voto en la pasada elección. Mediante una descarnada confrontación con la gran prensa que lo ataca, pretende mantener la fidelidad de sus bases de la “América Profunda”. Defenderse y twitear es una necesidad de él en medio de la puja que se está dando en Washington. Debe tomarse nota de que un 40% -o incluso un 30%- del respaldo que registran algunas encuestas sería equivalente a los que por él votaron en noviembre de 2016. Fue una elección donde, como es habitual, votó un 50% y algo más de los electores, con lo cual basta aproximadamente (y así le bastó a casi todos sus predecesores) un 27% del electorado para ser electo presidente.
Se maniobra para corregir el rumbo
Al nivel de algunos círculos influyentes ha devenido sentido común la noción de que las políticas en curso, sobre todo la proyección imperial para mantener a toda costa la pretensión de conservar la primacía a nivel planetario ha estado minando al país y contribuyendo a su declinación. Asumen la conveniencia de fortalecer al imperio a través de una estrategia que contemple “mayor desarrollo interno y menos desastres externos”. Parece abrirse una etapa de reordenamiento de fuerzas con perspectivas todavía inciertas, en la medida que esta estrategia se despliega en sus inicios sin un amplio consenso.
Según no pocos analistas, Trump y los círculos que lo apoyan representarían una opción distinta para “salvar el sistema”, pero muy compleja en el marco de los poderosísimos intereses creados en torno a la economía de guerra, los más que pujantes círculos financieros y las transnacionales en el marco de la globalización, y otros. De ahí la puja intra oligárquica.
De mucho peso deben ser sus respaldos cuando, por ejemplo, al asumir el cargo, el presidente dio marcha atrás al Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (TTP), pieza central de Obama en su política de reafirmación del poder económico y militar en la región del Pacífico, cambiando con ello parte de las reglas de juego global de las que han sido máximos beneficiarios desde la década del ’70 hasta la actualidad. Ello se conjuga con sus pasos para desentenderse de las obligaciones multilaterales, tener las manos libres y gestionar los acuerdos comerciales en un marco bilateral donde el peso específico y las presiones de EE.UU. se impongan.
Para reducir perspectivamente el sobredimensionamiento de los compromisos globales de EE.UU. y contar con recursos para encausar el desarrollo doméstico, renovar las infraestructuras, la explotación de energía (muchas de ellas contaminantes), o el regreso de las inversiones de capital, el actual mandatario necesitaría cierto reacomodo y reducción de tensiones sobre todo con Rusia, y también China, países que nunca ha descrito como enemigos mortales sino, más bien, como competidores. En septiembre de 2016 declaró formalmente: “Estoy proponiendo una nueva política exterior dirigida a hacer avanzar los intereses nacionales de los Estados Unidos, promover la estabilidad regional, y producir un alivio de las tensiones en el mundo”.
En lo que aquí analizo coincido y podría citar a muy respetados analistas, como es el caso de Michael Klare, experto en estos asuntos y habitual crítico del Presidente, quien afirma y da este título a un reciente artículo: “Es un error asumir que Trump no tiene una estrategia de política exterior” coherente. Y agrega que “sus discursos de campaña electoral y sus acciones desde la presidencia, incluyendo su reciente aparición con Putin en Helsinki, reflejan su adherencia a un concepto estratégico medular: la urgencia de establecer un orden mundial tripolar”.
Esa proyección no puede emprenderla de inmediato ni de manera lineal cuando el país tiene tropas desplegadas en más de un centenar de países, con múltiples compromisos de gobierno e internacionales, presupuestos aprobados y en general como heredero de patrones y programas puestos en marcha por sus predecesores.
Ese empeño sería también trasfondo de la puja que tiene lugar en Washington.
Un ejemplo son las expresiones de Trump tanto durante la campaña electoral como recientemente, en las que afirmó que el envío de tropas al Oriente Medio fue un gran error, “casi equivalente a lanzar ladrillos en un avispero”. ¿Pueden descartarse como frases demagógicas o meramente muestra de oportunismo político? ¿Fue ello demostración de un individuo caprichoso o que “no las piensa”? No está claro. Lo que no hay dudas es que él y varios de sus aliados en el gobierno son fuerzas polarizantes dentro de la élite y de la política del país.
Fuente: http://www.cubadebate.cu/especiales/2018/08/11/la-crisis-social-estadounidense-y-el-fenomeno-trump-en-su-justo-lugar/#.W3Hg2PZFxZR
-LA POSDATA DE MARCOS JESUS-
Crónica: La cortina de humo de Donald Trump (II)
CRONICA… ARGOSIS: ABRIL 28 DE 2018…
xMarcos Jesús Concepcion Albalat* (MF-EE.UU.)
Dirección General
ArgosIs-Internacional
Con fecha 10 de julio de 2016 escribí una Crónica con idéntico título a esta… Diría que es más o menos la continuación de la anterior, porque trata sobre algunas ideas que están dentro de mis especulaciones y que sigo manteniendo con respecto al actual Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica Donald Trump, como pudiera pensar, más o menos, de cualquiera otro que esté ocupando la Oficina Oval de la Casa Blanca…
En la anterior Crónica de la que hago referencias, empiezo así: ‘Al tratar un tema como el que abordaré en esta Crónica, corro el grandísimo riesgo de que se me acuse de ser uno de los que cree en la ‘Teoría de la Conspiración’, pero para esta contingencia estoy preparado a responder’… Y por supuesto, no puedo de ninguna manera dejar fuera la nota que aparece en la foto de la Crónica expresada por el Presidente Trump, que dice así, ‘En la vida no obtienes lo que quieres, sino lo que negocias’ (Jun/29/2015)…
Todos, de una forma u otra, tenemos un referente entre nuestras amistades, yo tengo varios con diferentes características, desde historiadores hasta emocionales capaces de romper el barómetro de las inimaginables presiones de la atmósfera, como es el caso de mi vecino, y compatriota, que cuando recibe noticias de los canales de televisión de ‘La Calle’ 8 de Miami, sin pensarlo me toca la puerta como si tuviera que llevármelo para el hospital…
-“Marcos, Marcos, hermano, ¿ya recibiste la última?
¿La ultima?, ¿Sobre qué?
-‘El pueblo de Nicaragua se ha votado a las calles en contra de los comunistas sandinistas… ¿recuerda que un día te lo comenté que a ese desgraciado de Ortega y a su mujer le quedaba poco en el trono?”.
Definitivamente mi compatriota es más que emocional y alarmista, aunque sus ‘primicias’ tienen alguna base de verdades pero muy confusas, y sobre esta ‘alarmante’ desinformación de mi muy querido vecino, pienso lo siguiente…
Lo invité a entrar a mi casa y le brindé café, que siempre acepta… Lo senté frente a mí y le pedí que me escuchara, advirtiéndole que mi opinión, después de revisar las redes, no era la verdad absoluta, pero le sugerí que cuando uno emita información se asegure de ciertos detalles, porque del dicho al hecho sobre lo que me comentó había un gran trecho...
Si, efectivamente, una resolución del ejecutivo de la República de Nicaragua, fue aprovechada por los que acechan el mínimo espacio para darle buen uso a los IDIOTAS (ignorantes), que en la vida real son capaces de inmolarse por míseras promesas o, incluso, porque reciben algún beneficio económico en ‘cash’…
Esto no es nada nuevo, desde niño conozco el procedimiento en diferentes escenarios sobre este comportamiento en mi época...
Por ejemplo, cuando se acercaban las elecciones presidenciales en la Cuba republicana, los llamados Sargentos Políticos le pagaban a mi abuela materna cinco pesos por cada voto de quienes vivíamos bajo el mismo techo y, por supuesto, que podían ejercerlo…
Analizando los sucesos de Nicaragua, todo apunta a que la crisis aumentará y se mantendrá por un tiempo…
En épocas anteriores se aplicaba el Golpe de Estado o la intervención de los Marines de EE.UU., y era más rápido lograr el objetivo… ¿Ejemplos? Chile, Argentina, Brasil, Panamá, República Dominicana, Guatemala, Granada... En el caso de Cuba lo intentaron en el 1961, pero fueron derrotados por primera vez en la historia de América en menos de 72 horas…
¿Quiénes son los que han propiciado que los EE.UU. se involucren directamente en los asuntos internos de otros países? Varios factores han propiciado estas intervenciones directas del Imperio... Primero entran en la escena los grandes intereses del capital y detrás de ellos quienes los estimulan para que esto ocurra... ¿Y quiénes son estos que ‘empujan’ por detrás? Las oligarquías de los países víctimas de los genocidios cometidos por la intervención de los EE.UU….
Para nadie es un secreto que Fidel Castro nos alertó sobre quienes originan estos lamentables hechos registrados en la Historia de la Humanidad, y apuntó con su dedo hacia los verdaderos responsables de casi todo lo ocurrido en contra de nuestra Revolución: ‘LA MAFIA DE MIAMI’…
¿Y que son las MAFIAS de nuestros países sudamericanos? Las poderosas oligarquías, que no sólo han ganado en conocimientos en estos últimos más de 50 años, sino también que han aumentado su capital saqueando –robando- las grandes ganancias de los enormes recursos del país y depositándolas en bancos estadounidenses y dispuestos a utilizarlos para su beneficio, en este caso, pagándole a los ignorantes de nuestros pueblos cuando perciben el peligro de extinción…
¿Y quiénes componen el grupo mayoritario de los ignorantes de nuestros países? Los más necesitados, los muertos de hambre, etc., esos que carecen de conciencia por falta de conocimientos… Y, por supuesto, sigue EE.UU. por detrás, pero UTILIZANDO OTROS MÉTODOS, pues no han dejado de intervenir en estos conflictos…
Hoy los modelos de intervención del Imperio son muchos más sutiles, más sofisticados por múltiples razones...
Por ejemplo, en titulares en los grandes medios de información presentan como los garantes de la Democracia Representativa a los llamados opositores –ANEXIONISTAS- de Cuba y Venezuela, y otros no menos conocidos, pues estos despreciables elementos históricamente nunca han dejado de existir...
¿Por qué hago referencia a que hoy los métodos de intervención de EE.UU. son diferentes?...
Recuerdo que en enero de 1959 cuando triunfó la Revolución cubana en Enero de 1959, EE.UU. le canceló en los 60 el conocido ‘preferencial azucarero´ y dejó de comprarle azúcar… Fue la primera medida y, para no quedarse corto, la bloqueó económicamente hasta los días de hoy…
Y pregunto, ¿hoy EE.UU. por qué no le deja de comprar petróleo a Venezuela, o le cierra las refinerías venezolanas establecidas en su territorio, o también le interviene las gasolineras Citgo propiedad de PVDSA? Porque hoy son otros tiempos que yo calificaría de más sofisticados, como consecuencia de su crisis interna…
¿Y cuál es una de las mayores crisis que hoy padece los EE.UU.?
- …“Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad. El mundo solo tendrá una generación de idiotas”… Albert Einstein** (1879-1955)…
EE.UU. ha sido sorprendido por su vertiginoso y acelerado desarrollo tecnológico que le ha traído consecuencias negativas al desempleo y por ende a los costos de sus propios programas sociales, porque donde hace algunos años se necesitaban cien personas para producir, hoy con una se logran los mismos resultados...
Recuerdo una conversación que tuve con un primo que es Ingeniero de la NASA en EE.UU…. Cenando en mi casa comentamos sobre la aparición del teléfono celular a finales de los años 80s… Recuerdo que a esos teléfonos le llamaban ‘ladrillos’, porque eran demasiado grandes...
Mayito, mi primo, me expresó: Primo, esos celulares hace años están listos para salir al mercado, pero no se autorizaron antes porque había que preparar la desaparición de la infraestructura actual existente en comunicaciones de la que dependían cientos de miles de personas… De haberse lanzado al mercado en ese momento, hubiera creado una poderosa crisis en la población... Los celulares, por ejemplo, no necesitan cables, porque todo es por el ‘aire’, incluso es mucho más económico en todos los sentidos, y así irán saliendo al mercado otros elementos que poco a poco sustituirán los viejos equipamientos, y, por supuesto, sufrirá las consecuencias del desarrollo la mano de obra, pero se requerirá también mucha más capacidad intelectual en nosotros’…
EE.UU. se ha ido demasiado delante para estar ocupándose de las minimeces, como resultado de su gran crisis interna, que avanza en el tiempo a medida que se va agravando… Muchos no la sentimos todavía, pero sí la mayoría de la población estadounidense, y sobre todo quienes fueron vacunados en épocas anteriores con el conocido ‘Sueño Americano’, los migrantes, porque ya no hacen falta, NO HACEN FALTA…
El súper desarrollo tecnológico a que hoy está sometido EE.UU., le exige adelantarse a peores circunstancias porque su población no está acostumbrada a vivir como un país subdesarrollado... ¿Y quién es el responsable de la actual crisis por la que está atravesando EE.UU. y que prácticamente recién comienza? El desarrollo tecnológico...
No hay que ser ni medianamente sabio para reconocer que si EE.UU. no se pone en ‘línea’ con los países que le están pisando sus talones, seguro, pero seguro, no solo sufrirá las consecuencias la población estadounidense, sino el resto de los países, absolutamente nadie quedará fuera de la crisis, con posibilidades también de desaparecer como especie humana… No lo vaticino, es que ya somos testigos de lo que ocurre a nuestro alrededor…
¿Y con qué países EE.UU. tiene que establecer bases sólidas y con ellos repartirse, no solo la crisis interna, sino el espacio de primerísima potencia y salir hacia adelante, de lo cual todos, al final, se beneficiarán? China, Rusia, Comunidad Europea, Corea del Norte, Irán, India, Pakistán y otros no menos importantes…
Recomiendo varias lecturas: Las promesas que hizo el actual presidente de EE.UU., Donald Trump en su campaña presidencial y su discurso cuando juró la presidencia de este país… Y considero muy importante ver la conferencia de prensa de la reciente visita del presidente de Francia, Emmanuel Macron, en la Casa Blanca y también su discurso en el Congreso estadounidense…
Solicito a los sabios en política internacional que dejen de estar leyendo los medios de información de EE.UU. donde solo atacan al presidente Trump sobre temas que más bien contribuyen a empañar lo que verdaderamente está sucediendo en nuestro planeta Tierra…
Independientemente de que esas “noticias” son denigrantes para el presidente Trump, no dejemos de aceptar que cosas peores han hecho anteriores mandatarios de este país, y el comportamiento de la prensa ha sido benévolo con ellos… ¿O ya se olvidaron de Reagan y de Clinton?, entre otros...
Pero lo que no se comenta en estos medios es que esa crisis también tocó a sus puertas, perdiendo poco a poco lo que una vez fueron coronados como EL CUARTO PODER.
¿Y por qué han perdido la corona? ¿Por el Presidente Trump o debido al súper desarrollo tecnológico que posibilita a cualquiera que lleve un celular en sus manos convertirse en periodista utilizando las redes?
Lamentablemente el papel que hoy utilizan estos medios de información en poco tiempo solo servirá para un uso muy privado del ser humano…
Entonces llegamos a la conclusión que estos poderosos medios necesitan del escándalo lo único que hoy vende, por el momento, para tener entretenidos a los IDIOTAS…
Con respecto a nuestro país, Cuba, no he dejado de sugerir a los de la Isla que nuestro cuartel general para combatir la poderosa oligarquía cubano/americana (LA MAFIA) tiene que ser desde aquí, en la ‘Calle 8’ de Miami, utilizando sus propios códigos...
Sobre eso, con fecha Mayo 15 del 2012, escribí la Crónica “La Coalición Cubano Americana” (CCA)… Léanla o reléanla, pues aunque de eso hace ya algunos años, parece que los tiempos que hoy vivimos los adiviné…
Nuestra retaguardia está prácticamente desarmada ideológicamente, me refiero al sector importante de nuestras nuevas generaciones, que solo piensan en tener el ultimo celular, una computadora y darle uso en la Red en temas efímeros, vestir con lo último de la moda, viajar fuera del país, etc…. Escribo con propiedad porque tengo hija y nieta en la Isla, más otros familiares... Ojalá me entiendan sin que piensen que soy pesimista, no es el caso…
Mi criterio se enfila a la exhortación, porque esta época, estos tiempos, no son para ocuparlos solo en consignas ni utilizar tantos espacios en metas cumplidas... Y si no cambiamos de estrategia, también veremos los mismos conflictos de Venezuela y los recién creados en Nicaragua en nuestro hermoso país... Ojalá el equivocado sea yo...
Debemos profundizar a través de las Organizaciones de Masas y el Partido, y acercarnos mucho más a la POLÍTICA INTERNACIONAL.
EE.UU. está dejando de ser la primerísima potencia mundial… Pero pretende seguir siéndolo y para eso debe ponerse de acuerdo con los que le están pisando sus talones…
A Donald Trump no lo eligió presidente el pueblo estadounidense, al Sr. Trump lo nombraron, que es diferente… Revisen la estructura de cómo se escogen a los presidentes en EE.UU. y como es el método existente de las elecciones y conocerán al monstruo en sus entrañas… Quien no entienda eso, entonces no sabrá en qué mundo vivimos…
EE.UU. es una Empresa, y a las Empresas lo único que les interesa son las ganancias…
Aprovecho para escribir lo que una vez expresó el Premio Nobel de la Paz José de Sousa Saramago (1922-2010)…
- ...‘Con la justicia pasa como con la democracia... Soy radical en ese sentido: no existe eso que llamamos democracia... No existe... ¿Cómo se puede hablar de democracia, si el poder real no es democrático? Tiene partidos políticos, parlamentos, elecciones, tienen esto y aquello... Pero eso llega a una altura, y se queda ahí... Tú puedes quitar un gobierno con tu voto, y poner otro... Pero eso no cambia mucho... A quienes no puedes quitar es exactamente a aquellos que influyen en la forma determinante de tu vida... Multinacionales, finanzas internacionales... esos poderes no están a nuestro alcance... No podemos quitar el poder del consorcio de la Coca Cola, y poner otra cosa ahí... Por eso digo que los gobiernos, el de Estados Unidos y los de Europa, no son más que los comisarios políticos del poder económico’...
También imagino que algunos al leerme me acusarán hasta de antiinmigrante, no es el caso… Ese tema es otro dilema en que se encuentra no solo EE.UU., sino los países que están en 'línea' -los mencionados anteriormente-, e incluso los del llamado en Desarrollo y Tercer Mundo…
Pero en estos últimos el sentido es al contrario, debido a las tragedias que existen en ellos en materia de corrupción, crimen organizado, tráfico de drogas y otras, lo cual también es producto del desarrollo tecnológico, pues ya no se necesita la mano de obra barata que antes era vital en EE.UU….
Sobre este tema aplicaría una frase muy conocida en mi país, Cuba: "NO HAY CAMA PARA TANTA GENTE"… Y debemos admitirlo, y prepararnos, por lo que sugiero a todos ocuparnos mucho más de nuestros países y no tanto de EE.UU….
Si el problema de nosotros es exigir, pues a exigirle a nuestros líderes, a nuestros Presidentes, y hagamos a nuestras naciones también fuertes y poderosas…
Les hago una simple pregunta: ¿Cómo es posible que nuestro hermano pueblo de México sea uno de los países más ricos del hemisferio y tenga la población más pobre del mundo?...
Hace unos días un compañero mexicano que es miembro de la Agencia de Información ArgosIs-Internacional en la Red me preguntó, 'Marcos, que tu opinas sobre el muro que quiere construir el loco de Trump'?...
Le respondí: 'Mi estimado hermano, si esta propuesta se la hubiera planteado Trump a Fidel en su época, seguro, pero más que seguro, que Fidel le hubiera aceptado el reto, y el muro lo hubiéramos construido los cubanos y de gratis'... ¿Pero quién de los que me leen pudieran entender mi mensaje?...
El mundo – UNA VEZ MÁS- se está desfragmentando, y por supuesto, en esta transición a la que se dirigen las grandes naciones tratando de solucionar sus conflictos internos, quienes más sufrirán las consecuencias serán los ignorantes que hacen mayoría en los países más pobres, y donde existen poderosas oligarquías con mucho capital listos a defender sus millonarias riquezas…
Estas oligarquías ya están dando muestra de su capacidad, porque también se han dado cuenta que a EE.UU. no les interesa inmiscuirse directamente en los conflictos nacionales como lo hacía en tiempos atrás, sin dejar de aceptar que sí están presentes para apoyarlas, como es obvio en los creados en Brasil, Argentina, Ecuador, Venezuela… y la reciente crisis que se originó en Nicaragua…
Entre el miedo y la incertidumbre, en el país que no esté bien articulado las oligarquías se aprovecharán de la mayoría y se nos van del ‘aire´…
Y ¿quiénes integran la mayoría en nuestros países latinoamericanos? Los IGNORANTES, los más necesitados, que se venden por cualquier cosa… Tiempo al tiempo…
**Albert Einstein fue un físico alemán de origen judío, nacionalizado después suizo, austriaco y estadounidense. Es considerado el científico más conocido y popular del siglo XX...
*Marcos Jesús Concepción Albalat… (Trinidad/Casilda, S.S., Cuba) Agosto 03 1947… Reside en Miami, Florida, Estados unidos… Licenciado en Gestión Comercial Internacional… @: marcosjesus360@yahoo.com... Director de la Agencia de Información ‘ArgosIs-Internacional’ en la Red… Web: http://www.argosisinternacional.com... @: argosisdirector@yahoo.com - twitter.com/ArgosIs - twitter.com/ArgosIsUSA - twitter.com/ArgosIsMiami - twitter.com/ArgosIsCuba – Yahoo!: https://espanol.groups.yahoo.com/neo/groups/ArgosIs-Internacional/info
“La sociedad no puede ser enemiga de sí misma... Si un medio de comunicación no está aportando y contribuyendo a la elevación educativa, cultural y espiritual de todos sus miembros merece ser cerrada, así de simple... Debido a que la propiedad de los medios de comunicación no es la libertad de expresión de la sociedad”... ‘ArgosIs-Internacional’ es una Agencia de Información en la Red, de carácter social (POR AHORA) con sede en la Ciudad de Miami, Florida, Estados Unidos; fundada en 1991… Web: http://www.argosisinternacional.com… Miembro de la ‘Federación Latinoamericana de Periodistas’ (FELAP)… Web: http://www.felap.info...
…Este Artículo, Declaración, Documento, Etc., seleccionado para su publicación, necesariamente no tiene que reflejar en su totalidad nuestra Línea Editorial… Nuestro propósito es establecer el vehículo de información que les permita a los demás formarse su propio criterio, especialmente en los acontecimientos políticos, económicos, etc., que inciden, directa y/o indirectamente, en cada uno de nosotros… "La educación y la instrucción no consisten en rellenar la mente de ideas ajenas, sino en estimularla para que produzca sus propias ideas"… Ahora les corresponde a ustedes hacer sus propias conclusiones… Participe y opine con razonamiento…
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